La casa bancaria emitió un comunicado que señala que “en virtud de noticias destacadas en diversos medios de prensa, sobre las condiciones de vida de los beneficiarios de los complejos habitacionales del Banco de Previsión Social y el estado de mantenimiento de los mismos, el Directorio manifestó que los beneficiarios son sujetos de derechos activos y autónomos, que llevan adelante su vida como tales de manera independiente.
El banco puntualizó que “cuando sus condiciones de autonomía se reducen o pierden, el programa prevé la posibilidad de que pasen, con su consentimiento, a residir en Hogares de Adultos Mayores, recibiendo la asistencia y cuidados correspondientes.
El BPS, respetando la dignidad y autonomía de los beneficiarios, acompaña el proceso de envejecimiento con asistencia técnica y actividades a cargo de los profesionales y funcionarios del área, así como a través de convenios con instituciones públicas y privadas de reconocida trayectoria.
Los beneficiarios de viviendas en carácter de comodato, son adultos mayores que reuniendo las condiciones exigidas, y luego de ser valorados por los servicios sociales de la Institución, quedan en condiciones de acceder al beneficio.
Expresiones como las vertidas (que los conjuntos de viviendas eran “depósitos de personas”) , a la vez que son lesivas de la dignidad de los beneficiarios y su forma de vida, y de los funcionarios que realizan con dedicación su tarea, perjudican y estigmatizan el Programa de Soluciones Habitacionales de la institución.
El programa cuenta con 6076 beneficiarios distribuidos en 258 complejos habitacionales, 745 residentes en hogares de adultos mayores y 1002 que perciben subsidios de alquiler.
Las expresiones vertidas a las que refiere el comunicado son las formuladas por el director del banco en representación de los empresarios José Pereyra al hacer declaraciones en oportunidad de un repaso de lo actuado en la Cámara Empresarial de Maldonado.
Había indicado que las viviendas eran "depósitos de personas".