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Nimo explicó que la empresa desinfecta las unidades con amonio cuaternario antes y después de los viajes. Asimismo, la Intendencia también controla el cumplimiento de los protocolos y la desinfección.

Codesa tiene hoy el 80% de su flota en circulación aunque se venden más de mil boletos menos que en noviembre cuando aún viajaban los liceales.

Nimo explicó que hay turnos en los "que no viaja nadie" y otros -coincidentes con los horarios de entrada y salida de los trabajos, por ejemplo- en los que hay mayor demanda.

En ese sentido, recordó que no existe el límite ni el aforo que regule la cantidad de pasajeros a viajar por cada frecuencia pero que se trata que puedan viajar todos sentados y que no haya exceso de carga.

También sostuvo que "lo lógico es cuidarnos entre todos" y tener en cuenta, cuando se aborda un ómnibus, en qué lugar uno viaja y sobre todo si toca ir parado.

INSPECCIONES DE LA IDM NO MOSTRARON INCUMPLIMIENTOS
Desde la intendencia se informó que también se han mantenido controles diarios permanentes, a través del Sistema Informático Busmatick, detectándose una mayor ocupación en los últimos días en los ómnibus, pero con distanciamiento social entre pasajeros.

No obstante, se solicitó a las empresas la incorporación de más turnos. Por otra parte, se continúa con la desinfección tanto al comienzo como el término de la jornada.

Se controla el uso del tapaboca, con carácter obligatorio, en caso de no tener los inspectores los proporcionan, el respeto al distanciamiento fijado en el marco de las medidas sanitarias, así como la higiene en las unidades.

Las inspecciones y controles se realizan desde el 26 de noviembre a la fecha.


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