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Un hacendado de Mataojo concurrió a la hora 19:00 del jueves a la sede de la Seccional 4ª de policía para radicar una denuncia de abigeato.

Explicitó en la denuncia que se encontraba en su vivienda abstraído por tareas diarias, cuando sintió disparos de armas de fuego. Dijo que le pareció que provenían de su propio predio.

Con la mayor cautela salió a averiguar de qué se trataba. En una recorrida que fue haciendo pronto encontró el cuerpo de una vaca suya muerta a balazos.

Superada la impresión por el atropello de que estaba siendo objeto, se trasladó a la comisaría para radicar la denuncia, completó.

El comando de la comisaría dispuso que de inmediato se trasladara una patrulla policial al lugar acompañando al damnificado.

En una recorrida por el lugar, donde dominan los campos un caminos de balasto, los efectivos advirtieron la presencia de un Mitsubishi Lancer. En el interior del vehículo había dos hombres jóvenes; después se determinó que uno tiene 24 años de edad, y el otro 28. Este último tiene antecedentes penales.

Se decidió practicar la detención de ambos, los únicos seres vivientes encontrados en las cercanías del teatro de la escena denunciada, y se les trasladó a la comisaría.

La policía de Mataojo avisó a la juez de feria de San Carlos lo que estaba pasando. La magistrado se interesó por los detalles, y entendió que para hacer de esto un caso judicial inculpando a los detenidos, le faltaban pruebas que los vinculen con la vaca muerta a tiros.

La magistrado ordenó el jueves 17 de julio a los policías encontrar esas pruebas mediante rastrillajes por el lugar procurando encontrar el o las armas usadas, o un indicio que permita inferir que quienes se tiene detenidos hayan realizado el delito denunciado. La juez ordenó, no obstante, que se mantenga detenidos a los dos hombres hasta completar el procedimiento.

La comisaría de Mataojo solicitó de inmediato apoyo a la Guardia Rural de la Policía Científica de San Carlos, para encontrar las pruebas que faltan.

Con una orden de allanamiento los efectivos policiales visitaron las casas de uno de los detenidos, Ricardo Martínez Puppo, de 28 años de edad de 28 años de edad, quien tenía antecedentes penales.

Encontraron en la vivienda varios cuchillos de faena, un rifle marca CBC calibre 22 brasileño, y 49 cartuchos vivos para ese fusil.

Estas resultaron pruebas suficientes para el juez en lo Penal de San Carlos dictara en la tarde del sábado 19 de julio el procesamiento de Martínez Puppo, como autor de un delito de abigeato especialmente agravado por la pluriparticipación.

Para el otro detenido, A.R. (iniciales de nombre y primer apellido), de 24 años, sin antecedentes penales, dispuso el procesamiento por un delito de abigeato especialmente agravado por la pluriparticipación.

Ordenó que el primero de los citados pasara de inmediato a cumplir con prisión preventiva hasta que el proceso de acusación se complete con una sentencia. A A.R. le impuso cumplir con arresto domiciliario nocturno (desde la puesta del sol hasta su salida al día siguiente) por un plazo de 60 días.