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Se lleva adelante un plan de rescate de los espacios públicos que pretende abarcar aspectos arquitectónicos, paisajísticos y funcionales, así como también a las necesidades sociales.

Dentro de los objetivos se apunta principalmente a las áreas verdes: parques, avenidas, y plazas, incluyendo el cuidado del arbolado urbano y la incorporación de nuevos ejemplares. En ese sentido, la IDM ha realizado una vasta plantación con la colocación de aproximadamente 10 mil árboles en diferentes zonas, además de la poda y tala de otros que se encontraban en situación de riesgo, mal estado sanitario, o ramas localizadas sobre cable de energía eléctrica.

Paralelamente, se ejecutaron más de 3 mil trabajos de descope, retiro de ramas y corte de árboles de gran porte para evitar posibles caídas o problemas en la vía pública.

Asimismo, Espacios Públicos brindó coberturas de emergencia dando respuesta a las consecuencias sufridas por varios eventos climáticos registrados en el departamento, así como también la reposición de árboles caídos. Se contempló cada situación -general o particular- “siempre y cuando se encontrara dentro de la órbita, actuando de manera eficiente y con pronta respuesta”. Una de las prioridades principales radica en “el cumplimiento y la disposición permanente de hacia el usuario y su entorno”.

Sin embargo, se aclara que la Administración “no puede cargar con toda la responsabilidad y cumplir con las demandas realizadas para tala y poda de árboles en veredas que puedan estar afectando los cables de UTE y su funcionamiento”.

Por lo tanto, la IDM no se hará cargo de podar o talar aquellos árboles que presenten buenas condiciones aunque estos estén interfiriendo en el tendido eléctrico. En ese sentido, se explicó que hay una alta demanda y que los técnicos y operarios “no dan abasto con el número de solicitudes que llegan” en relación a interferencias en cableado.