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“Hay que darle drama a la situación de los uruguayos, no a la discusión de la bandera de Lacalle Pou; el drama es la situación de muchos uruguayos, ahí hay que trabajar, y me parece que la seriedad habría que darla en la discusión de propuestas políticas, en los debates”, dijo, en respuesta a la reacción que causó el episodio en filas políticas.

Agregó que “nadie lo confunda a esto (al debate) con un enfrentamiento, es discutir ideas, es civilizado; y bueno, mientras discutimos de ‘la bandera’ de Lacalle Pou”.

El candidato atendió a FM Gente cuando volvía a Montevideo de su peluquero de Pando, Hugo, y sin aviso previo aceptó analizar los temas que le fueron puestos delante. Pero el tema central fue el escándalo que se armó con su ejercicio “la bandera”.

“LA BANDERA” COMO UN INCIDENTE
Lacalle contó cómo fue hizo el ejercicio conocido como “la bandera”: “Veníamos de almorzar con los periodistas de El País, que estaban ahí; les dije: vení, vamos a almorzar; cuando estábamos llegando al acto la miré a la fotógrafo de El País, y le dije: Mirá, te voy a regalar una foto”.

“Porque, desde hace años, pasa rápido el tiempo, pero 22 años que a cada lugar que voy, no sé por qué, es un ejercicio que desde chiquitos hacíamos cuando nadábamos, yo competía en natación, y nos hacían hacer ese ejercicio”, contó.

Recordó que “no sé por qué, un profe; siempre me quedó, y siempre que paso (frente a una barra vertical), pum…” “Bueno, ta’, a la vida hay que agregarle alegría”, redondeó, sacando el manual propio de Filosofía.

“Lamentablemente, no sé si lamentablemente o por suerte, pero me han dado como quien lava y no tuerce; se ve que no tienen otra cosa para criticarme; sería mucho mejor esta campaña si pudiéramos debatir, pero por ahora van a discutir si está bien la bandera, o si está mal, yo que sé”, redondeó.

AUTENTICIDAD, IRONÍAS, Y BIOLOGÍA
Lacalle Pou negó que estos incidentes que tienen tanta repercusión en los medios masivos y las redes sociales sean estudiados para aprovecharlos como parte de la campaña electoral.

“No, son cosas mías, creo que es mejor que la gente conozca a las personas y no al personaje; si conoce a la persona, para bien o para mal, va a decidir si nos vota, si no nos vota, porque al final del día el que gobierna, el que quiere, el que se esfuerza, el que trabaja, es la persona y no el personaje”, volvió a filosofar.

Sin pausa, reforzó la respuesta anterior: “Ahí no hay filtro, no hay filtro, soy esto; ojalá que la gente confíe en mi, ojalá”.

“Esto es autenticidad pura, eso salió ahí, salió, salió; a esta altura me voy a cuidar de hacer ‘la bandera’, porque genero grandes ofensas haciendo la bandera que voy a tratar de ser un poquito más cauto en esas cosas”, deslizó, ahora con aparente ironía.

Puso especial énfasis en descartar que le haya dado al episodio una intencionalidad biológica respecto al candidato del Frente Amplio, Tabaré Vázquez, quien le duplica en edad. “No, no, no, nunca hablé de la biología, al revés”, aseguró.

De inmediato acotó: “Ta’, puede ser, yo que sé; de nuevo entramos en las suposiciones porque no tenemos confirmaciones, no tenemos hechos que puedan mostrar en qué pensamos igual, en qué pensamos distinto, en qué nos podemos poner de acuerdo”.

“Yo tengo el olfato de que se va a dar (el debate), que se va a dar la discusión en algún momento”, confesó, sin que nadie le preguntara. Lacalle Pou volvió a mostrar su obsesión por debatir con Vázquez, y vinculó permanentemente el episodio a ello.

ES MUY PRONTO PARA ENCUESTAS
Confió que “tenía una dialéctica en estos meses con las encuestadoras, pero creo que hicieron su trabajo; para mí, es muy pronto hablar de cualquier resultado, muy pronto, bueno, malo, más o menos, para mí es muy pronto”.

“Hasta que no estemos entrados en septiembre creo que va a ser muy difícil aventurar cualquier cosa; a la barra nuestra este tipo de encuestas obviamente les genera una alegría, les genera un empujón, y es muy lindo también cuando se reciben noticias que son alentadoras, es bueno, es bueno”, dijo.

Sobre la posibilidad de que las alusiones de Vázquez a las encuestas sean una señal de nerviosismo, Lacalle Pou respondió que “no quiero ni opinar; de nerviosismo o no, no, ni idea”.

“Sí me lamento de que en Uruguay no existan debates, eso es seguro, eso no me parece bueno, no me parece que aportemos a generar conciencia ciudadana, no me parece”, volvió a reclamar.

Concluyó con que el “querer ser gobernante, entre otras cosas, nos exige la responsabilidad de generar conciencia ciudadana también; es mi punto de vista y no necesariamente tiene que ser respondido por otros”.