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“Estábamos tratando de sacar el auto… De hecho, yo lo estaba haciendo, tratando de no tocar ningún auto en las maniobras que hacía” narró.

“Ni bien saqué el auto, apareció una persona totalmente fuera de sí, insultándome me dijo: ‘Negra de mierda; espero que no me hayas tocado el autor, porque te mato…’ Me asombró muchísimo. Estaba uno de los chicos que cuida los autos y me iba guiando. Además mi auto tiene cámara. La persona que estaba conmigo le dijo que se calmara un poco y le expliqué que estaban todos los autos mal estacionados y el de ella (la Mini Cooper) estaba muy cerca de nuestra entrada y no podíamos sacar el nuestro”, agregó.

Destacó que, en ese momento, empujó a su esposo y “lo tira contra el capot del auto… Estaba en bajada y nadie se imaginó que lo iba a empujar, y le pega un golpe, con el puño cerrado, en uno de los oídos. En realidad fue leve, pero fue un shock por lo inesperado y porque fue en la pendiente de la rampa; y a partir de ahí no para de insultar, de pegar… Estaba la gente de seguridad de Tequila, los chicos que cuidan los autos y todos le decían que se calme. Y le pedíamos que moviera el auto 20 centímetros para que todo se terminara allí, pero no había forma de hacerla entrar en sí”.

Dijo, además, que “la chica, que manejaba el auto, amenazó de muerte a Marcelo”, su esposo, y a ella misma.

“‘Si tengo un arma, los mato a los dos’, nos dijo”, añadió. Estimó que ella podría ser la nieta de Susana Giménez. “Podría ser ella… A mí me dijeron que sí”, señaló.

Binaghi contó que, “después de todo este episodio, la chica que no se calmaba dijo que iba a buscar a su mamá. Y apareció su mamá (la hija de Susana) y su pareja a tirarnos piedras contra el vidrio y contra la puerta. Nos rayaron la puerta. Y con insultos de una manera nunca pensada”.

“Apareció mi hijo de 17 años, y le pidió que se fueran… Y de vuelta lo insultaron, con comentarios homofóbicos”, subrayó.

Confirmó que se hizo la denuncia en la Seccional 12 de La Barra. “Nos preocupa que gente con este manejo, esta impunidad, estas exaltación, tenga la posibilidad de venir, sentarse en la puerta de casa, tirarnos piedras y de amenazarnos. Presentamos fotos del auto y los datos que teníamos. Veremos qué sucede. Quedamos a la espera de lo que decida la justicia”.

También señaló que su esposo fue al hospital “y se hizo ver los golpes. Le subió la presión y lo tuvieron que medicar”, aunque luego retornó a descansar y se encontraba bien en la tarde de este miércoles.

“Fue un mal momento, impensado”, reflexionó.




Foto: Prensa Fm Gente