El alcalde de Maldonado, Juan Carlos Bayeto, confirmó que firmará “un protocolo” con la dirección de Movilidad Urbana de la Intendencia para devolverle los inspectores de Tránsito que recibió. De esta forma, el jerarca fernandino pondrá punto final a un largo período de reclamos que no fueron atendidos desde el gobierno departamental y al choque generado con los inspectores, reacios a acatar el sistema de trabajo municipal.
Al explicar la situación, Bayeto explicó al diario Correo de Punta del Este que sólo recibió ocho de los 15 inspectores de tránsito que reclamó el año pasado y que, para colmo, éstos no respondían a los perfiles solicitados.
Admitió que se enteró del traspaso de funcionarios la tarde anterior a su llegada al municipio y que entonces no disponían ni de motos ni de teléfonos para cumplir con su tarea. Añadió que tampoco recibió los espirómetros solicitados y que, por ese motivo, pidió a Movilidad Ciudadana que tuviera en cuenta a los inspectores del municipio cuando se realizaran operativos de alcoholemia, lo cual nunca ocurrió.
No obstante, Bayeto lamentó que los inspectores no hayan acatado las pautas de trabajo marcadas a su llegada y los cuestionó por negarse a salir a la calle. Según el alcalde, los funcionarios le transmitieron claramente su descontento por haber sido trasladados al municipio y no cumplieron con el sistema de trabajo estipulado.
En tal sentido, dijo que elevó un informe a Recursos Humanos de la Intendencia sobre la actitud del jefe del equipo de inspectores, lo cual motivó que se le bajara de grado. Esto también generó un problema, ya que no hubo quien lo sustituyera por falta de disponibilidad de personal en Movilidad Urbana.
La acefalía en el equipo de inspectores afecta al control del tránsito en las calles de Maldonado desde hace unas tres semanas. Bayeto explicó que, para paliar la situación, “una persona” de Movilidad Ciudadana es quien indica las tareas al cuerpo inspectivo y luego se retira.
“Nadie controla, porque no hay a quien ellos reconozcan como controlador. Entonces, yo no puedo decir que la tarea se cumple o no se cumple. Lo que sí puedo decir es que la mayor parte del tiempo los inspectores están en la oficina”, admitió.
Aclaró que devolverá los funcionarios a la intendencia porque el municipio nunca alcanzó las condiciones para asumir esa responsabilidad. “Nunca pudimos tener la cantidad de funcionarios ni las condiciones en las cuales queríamos trabajar, entonces no podemos ser tan rígidos y no darnos cuenta de que efectivamente no estamos cumpliendo las funciones como aspirábamos”, concluyó.
(ver carta con reclamos de los inspectores en el link Documentos de esta página)