VENIMOS DEL CIELO!!! Los navegantes del Cessna T41 FAU 603 Teniente Segundo Aviador John Carreño (piloto), el Capitán Navegante Germán Soboredo (copiloto) vivieron una situación al límite junto al cabo Gereda de Bomberos.
La situación fue muy bien resuelta por el piloto cuando el motor entró a fallar.
El problema se empezó a generar, al parecer, a la altura de Piedras del Chileno aproximadamente pero más adentro de la costa.
A medida que el motor no respondía se fueron volcando hacia el mar. Desde la parada 40 en adelante fueron momentos de nerviosismo y zozobra para los ocupantes de la aeronave.
Ya prácticamente sin motor, el piloto tenía por delante una difícil decisión, ya que debía buscar un lugar donde aterrizar.
Ante sus ojos tenía la Interbalnearia y el perímetro costero de la playa mansa.
Muchas personas en la playa vieron pasar muy bajo, casi sobre sus cabezas al T41.
También debía tratar de generar el menor daño colateral.
La aeronave cada vez perdía más altura y ya sobre la costa, a la altura de la parada 25, giró hacia el mar donde había gente bañándose pero la pericia y por supuesto la fortuna, hizo que encontrara un "blanco" rodeado de boyas, donde operan las motos de agua que no había nadie...Allí lo dejó caer. Y amerizó.
En virtud de tener un tren de aterrizaje de triciclo y fijo, al tocar el agua capotó.
Afortunadamente los tres ocupantes del Cessna militar lograron salir a la superficie, siendo ayudados por dos integrantes de la Brigada de Guardavidas de Maldonado que los acompañaron a la costa. Sólo golpes leves y raspones. Luego de ser revisados por los médicos en el Hotel Serena, fueron llevados a Mautone y de allí a Montevideo.
Un día que estos hombres recordarán por siempre.