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Talvi, que en la noche del martes dio una charla para unas 160 personas invitado por la Cámara Empresarial de Maldonado, dijo este miércoles a FM Gente que está realizando una gira por varias zonas del país.

Destacó que estos “encuentros ciudadanos” se cumplen bajo el lema “por el Uruguay que soñamos”.

“EL Uruguay necesita volver a soñar que hay un país posible, mejor que este que tenemos, y que las soluciones están al alcance de la mano”, indicó.

Señaló que el CERES resolvió dialogar con la gente común en todo el país, y no solo con las élites que tienen el poder de decisión, “porque el Uruguay necesita cambios impostergables, que ya no pueden demorar. Y, con esa conciencia, que la ciudadanía empiece a exigirle al sistema político que le dé respuestas serias, que produzcan efectos más o menos mediatos y que ofrezcan un horizonte de posibilidades”.

Dijo que ya se han hecho dos encuentros en Montevideo, que además estuvo en Pando, en Florida, en Colonia, ahora en Maldonado y que la semana que viene va a Dolores, en el marco de esta gira que seguirá en otras ciudades y localidades del país.

Talvi señaló que nota que el ciudadano común “es receptivo” a las propuestas que está presentando en materia educativa, con el fin de “empezar a terminar con la fragmentación social”, que “son posibles y financiables con los recursos que ya gastamos”.

Agregó que la gente es receptiva, se conmueve y ofrecer sumarse a esta iniciativa, por lo que se viene coordinado la organización “para mantener esa llama encendida”.

Al analizar la realidad del país, el economista dijo que “cuando uno mira la foto detrás de la bonanza uno ve que nada de lo que está asociado a un proceso de desarrollo sostenido cambió. Tenemos casi el mismo país 10 años después, con la única diferencia es que usamos la bonanza para gastar un montón de dinero en educación, sin tener resultados. Duplicamos el presupuesto, los resultados no se dieron. Duplicamos el presupuesto en seguridad, se triplicaron las rapiñas, los homicidios subieron un 60% y las narco-mafias se instalaron en el país… Casi que triplicamos en gasto en salud y nadie le dice a uno que sienta que ha habido una mejora extraordinaria en las prestaciones”.

“Lo que pasó es que se gastó el dinero que entró en una época de bonanza y los contribuyentes, los ciudadanos, no vemos resultados”, resumió.

El director del CERES interpeló a los dirigentes del MPP, que son a su juicio los que controlan la educación en el país, por qué se está en una parálisis, “cuál es la lógica que está detrás de que no se haga absolutamente nada, cuando Uruguay está en ante un fracaso estrepitoso en materia de educación. Y no hay otra manera de calificarlo. Cuando cuatro de cada 10 chicos terminan el liceo y cuando el 50% de los chicos, promedio nacional, de acuerdo a las pruebas internacionales, uno de cada dos, no reúne las destrezas mínimas para insertarse productivamente en la vida laboral y en la sociedad del conocimiento. Y esos porcentajes suben al 80% en los segmentos vulnerables. Ahí son ocho de cada 10 los que no reúnen las destrezas para insertarse en la vida laboral”.

Señaló que los que no se integran están condenados a trabajar en la economía informal o a vivir de la caridad del Estado o termina optando por el delito “como una forma de vida. U opta por las forma más lucrativa del delito: el tráfico de drogas”.

Señaló que, entonces, “los narcotraficantes se vuelven entonces empleadores atractivos. Tenemos que terminar con eso… Nosotros hemos propuesto instalar 136 liceos públicos modelo en cada uno de los barrios vulnerables del país. Se precisan 75 en Montevideo, 16 en la periferia metropolitana y 45 en el interior. Sabemos dónde tienen que estar porque hicimos un análisis manzana por manzana”. Resaltó que ya hay experiencia en este tipo de centros y citó como ejemplo lo que se ha logrado en cuatro años el liceo “Impulso”, que es gratuito y laico, en pleno Casavalle.

Indicó que hacer funcionar estos 136 liceos, gestionados desde el Plan Ceibal y no desde ANEP, según su planteo, cuesta 240 millones de dólares por año. “Eso es lo mínimo que perdió Ancap en los últimos cuatro años. O sea que hubiéramos gestionados bien una empresa como Ancap, ya hubiéramos tenido los recursos para hacer esto. Y podríamos sacar a 50 mil chicos de la marginalidad”. Asimismo, subrayó que el gasto por alumno sería prácticamente que el que hoy destina la ANEP, aunque con mejores resultados.

“La experiencia está…. Se conoce ‘la cura contra el cáncer’. Hay que administrarla y generalizarla con recursos públicos. Los recursos están. Con la misma plata que hoy se gasta se podría estar haciendo esto. Y si hay que poner algo más, es mínimo. Y aunque hubiera que poner, esto sí que vale la pena, porque le permitirá al Uruguay reconstruir su tejido social. Y si no lo reconstruimos, en el futuro más o menos previsible, estamos terminados. Vamos a ser un país latinoamericano más. Y quien ha viajado por Latinoamérica sabe que el Uruguay todavía, y a pesar de todo, es un país muy distinto”, aseveró.

“Yo me pregunto… Esta es una idea. ¿Por qué esto o algo parecido a esto no se está haciendo ya? ¿Por qué no estamos haciendo absolutamente nada?”, inquirió.

Sugirió que el presidente Tabaré Vázquez “se podría plantear que, antes de que termine su gestión, estos 136 liceos estén funcionando”.


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