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Suárez aseguró que solamente una empresa está autorizada por la Intendencia para realizar cabalgatas en la zona y se acoge, totalmente, a la normativa ambiental que prohíbe circular con equinos por las dunas. Si hay otras operando, están en infracción, aseguró.

Aunque es frecuente ver personas cabalgando en la costa de José Ignacio y muchas actividades son públicas y ampliamente divulgadas, el alcalde dijo que el Municipio nunca constató esas situaciones.

Aseguró que ningún inspector municipal había intervenido a un jinete hasta que, días atrás, se toparon con el empresario francés Pierre-Hugo Palenzuela y su familia. “Enfocados a los vehículos de 4 x 4, circunstancialmente, nos encontramos con esta situación. Se podían estar dando otros casos, pero la detectamos en ese momento”, comentó el alcalde.

Añadió que pidió informes sobre la actuación del inspector municipal en el caso Palenzuela aunque está “convencido de que fue correcta” y otro sobre las intervenciones a vehículos en lo que va del verano. Todavía no sabe si los funcionarios actuaron en terreno público o se introdujeron en propiedad privada, como trascendió días atrás.

Por otra parte, Suárez admitió que ni el municipio ni la Intendencia han atacado el caos que se genera en el tránsito de José Ignacio en días pico de la temporada. Reconoció que fines de diciembre y primera semana de enero sólo hubo un inspector para miles de conductores.

De todos modos, opinó que el problema requiere intervenciones viales. Convertir en avenida la calle Los Cisnes para facilitar el ingreso y salida al casco del balneario debería ser “una prioridad”, dijo. “Es una obra de porte. No hemos podido avanzar porque hay una situación de privados que escapa al municipio”, argumentó.


Escuche las declaraciones del alcalde: