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Camilo Silvera explicó a FM GENTE que se encuentran en la etapa de recolección de información y documentación para la presentación de la denuncia penal por estafa y apropiación indebida.

La feria judicial se levantó este lunes “y naturalmente (la Justicia) va a actuar con otra celeridad”, precisó Silvera.

El abogado señaló que es clave investigar la ruta del dinero y conocer dónde está el activo de la empresa, y para ello debe actuar Fiscalía. Además, indicó que puede implicar una investigación de lavado de dinero.

Asimismo manifestó que ese activo “es el que va a solucionar los conflictos y plantearnos una posible reorganización de la empresa”.

Conexión Ganadera operó durante 25 años en el mercado uruguayo y las inversiones que realizaron los damnificados “van desde 5000 dólares hasta 500.000 dólares”, puntualizó.

Silvera detalló que las historias de los inversionistas son variadas, “desde gente que invirtió sus ahorros de vida para la jubilación, hasta gente que recibió una herencia o vendió su negocio que funcionaba a la perfección”.

Puntualizó que la empresa le aseguraba a sus inversores cobrar una renta fija, si invertían determinado dinero, “sin necesidad de hacer nada”. “Si el ganado crecía o no, si lo vendían o no, la persona no debía asumir ningún riesgo”.

Conexión Ganadera, junto con Grupo Larrarte y República Ganadera, son acusadas de operar bajo un esquema conocido como Ponzi, una forma de estafa piramidal que atrae a los inversores y paga utilidades a los inversores anteriores con fondos de inversores más recientes.

Estas empresas ofrecían bonos ganaderos con una rentabilidad anual en el entorno del 10 % - Conexión Ganadera ofrecía el 7% - y cuando algunos de sus inversores quisieron retirar lo invertido se enteraron que no podían hacerlo porque su dinero no estaba.

Las pérdidas de Conexión Ganadera ascienden a los 250 millones de dólares y los damnificados en todo el país son más de 4000.