Un hombre de 19 años de edad, sin antecedentes hasta ahora, fue procesado acusado de haber incurrido en un delito continuado de violencia privada. Si bien no se obligó a cumplir con la prisión preventiva, se le instaló una tobillera electrónica con la advertencia de que no se le vuelva a acercar a su ex mujer, informó la policía.
Una vecina llegó a la unidad de Violencia doméstica y Género de Maldonado, el lunes 16 de enero a la tarde, para denunciar que su ex pareja, con quien tiene una niña en común, la somete a agresiones físicas y verbales procurando retomar la relación.
Dijo que la llama constantemente por teléfono y se presenta en su domicilio, exigiéndole que retome la relación con él. Ante la permanente negativa de la señora a volver a su lado, la agrede verbal y físicamente.
Agregó que ese mismo día había llegado a su domicilio, se planteó el mismo tema, derivó en una discusión, y finalizó con una nueva agresión física.
Efectivos policiales procedieron a ubicar y detener al acusado. Fue identificado como A.F.R. (iniciales de nombre y apellidos), de 19 años de edad, carente de antecedentes penales.
Interrogado, fue puesto a disposición de Penal 4º turno. La juez ordenó que la denunciante fuera sometida a una valoración médico forense. Realizada la diligencia, los resultados fueron puestos a disposición de la juez de feria.
La magistrado dispuso entonces el procesamiento de A.F.R. a quién acusó de la autoría de un delito continuado de violencia privada. Le impuso como medida sustitutiva a la prisión preventiva, la prohibición absoluta de acercarse a la víctima, y para reforzar esa decisión, le obliga a llevar una pulsera electrónica que denuncie el instante en que deje de cumplir con lo ordenado.